Presentación del libro del pastor Juan Gattinoni

Estoy presentando este libro con un título compuesto, lo que es, sin duda intencional: “Hay un niño en la calle” y “Dejen que los niños vengan a mí”. Ambas partes de este título refieren a fuentes distintas, pero tienden a formar un solo sentido.

“Hay un niño en la calle” refiere a la clásica canción de Armando Tejada Gómez y Ángel Ritó que fuera revisada y magníficamente grabada por la cantora Mercedes Sosa y René Pérez del grupo de Reggaetón Calle 13. Por cierto que es un placer escuchar la canción, pero el título ya deja entrever por dónde va la preocupación.

“Dejen que los niños vengan a mí” son palabras de Jesús (Mateo 19:14), dichas en un contexto donde los niños eran poca cosa y podían llegar a ser más una molestia que una bendición. Por cierto, así como la anterior frase, dice por si misma para dónde va la preocupación y la tarea.

Unir estas dos frases provenientes de contextos distintos, que hablan por sí solas, en el título de un libro es el intento de hablar de la tarea que, creyentes en Cristo Jesús, debiéramos asumir como central y prioritaria en la misión de Dios. Así como en una hambruna, hundimiento o crisis social surge casi sin discusión y con toda lógica la frase “los niños primero”, la misión que Dios pone en manos de quienes le siguen es esa: niños y niñas primero. Proteger, cuidar y, justamente, salvar a los niños y niñas. ¿O acaso en este siglo XXI no andamos a los tumbos entre hundimientos, crisis sociales, pandemia y hambre de bien vivir?

Palabras del autor, Juan Gattinoni, en la Introducción.