La UMESP ofrece natación gratuita para personas con enfermedades neurológicas y ortopédicas
Las clases tienen lugar en el Policlínico de la universidad; el proyecto es una iniciativa de cursos en Educación física y fisioterapia.
Es común que las personas con enfermedades ortopédicas y neurológicas tengan miedo de comenzar prácticas de actividades físicas. La razón es casi siempre la misma: inseguridad. Para estos casos, el seguimiento de un profesional especializado es fundamental para evitar lesiones. Consciente de esta demanda, los profesores de los cursos de Educación Física, Luciano Nardelli, y Fisioterapia, André Radl, de la Universidad Metodista de São Paulo (UMESP) iniciaron un proyecto gratuito de natación adaptada. Las clases tienen lugar en la piscina del Policlínico de la universidad y son supervisadas por profesores acompañados de estudiantes de la UMESP.
El proyecto se inició en abril con pacientes del propio policlínico. “Muchos pacientes afectados por enfermedades neurológicas y ortopédicas acaban sin rendir actividades físicas porque es difícil encontrar cuidados individualizados. Eso es exactamente que hacemos aquí. En este corto tiempo, recibimos una respuesta muy positiva de nuestros pacientes. Y los beneficios no son solo físicos, también son psíquicos, con una memoria mejorada, autoestima y calidad de vida”, explica Radl.
El proyecto es gratuito y la puerta de entrada es el Policlínico UMESP. “Esta idea surgió de nuestro deseo de mirar al individuo de manera global. Por eso decidimos unirnos Educación Física con Fisioterapia. Al hacer esto, los profesionales salimos de nuestra zona de comodidad para comprender mejor a nuestros pacientes. Entonces, todos crecimos, ellos y nosotros “, resume Nardelli.
La idea de los coordinadores es, en el futuro, ampliar la oferta deportiva y de servicios.
La UMESP tiene una tradición en la enseñanza inclusiva de actividades físicas. Entre 2003 y 2013, el Proyecto Vida ofreció clases de diversos deportes, como natación y capoeira, así como teatro y danza, para estudiantes con discapacidades físicas.
FUENTE: UMESP