Esta semana nos cuenta sus orígenes la Escuela y Liceo Crandon Salto que tiene su inicio en la vocación educativa de la Iglesia Metodista.
El Mtro. Rodolfo Urrutia comenta que fue en el siglo XVIII que Wesley impulsó la tarea educativa entre la nueva clase obrera que surgía como consecuencia de la Revolución Industrial. Desde el comienzo de su misión en el Uruguay este aspecto educativo de la Iglesia Metodista se concreta en proyectos que darán origen al Instituto Crandon de Montevideo.
A principios del año 1956 un grupo de ciudadanos salteños entre las cuales se encontraban varias exalumnas de Crandon, habían manifestado sus inquietudes a las autoridades de la Junta Directiva, para crear una filial en Salto.
La respuesta de la Junta fue inmediata y se creó una Comisión Honoraria integrada por: Sr. Carlos Ubici y Sra., Sra. Edith Gamundi de Gallinal, Dr. Migliaro y Sra., Sr Carlos Jones (hijo), Sra. de Preve, Sr. Rostán y el Pastor Dr. Eugenio Stockwell.
En el año 1957, se funda la primera Escuela Metodista en el interior del país, Crandon Salto, como filial del Instituto Crandon Montevideo.
En 1906, el Liceo Evangélico, pasó a llamarse Instituto Crandon, en homenaje a la Sra. Frank P. Crandon, (Illinois), una comprometida metodista quien trabajó desde los Estados Unidos y brindó apoyo económico y moral a la obra educativa.
Primera ubicación
Se instaló en una vieja casona con varias habitaciones que hacían de salones y un patio central. El 16 de marzo de 1957 con la presencia de la Directora General del Instituto Crandon Montevideo, se procedió al acto de apertura de los cursos. Los primeros 70 alumnos componían la matrícula inicial de Jardinera a 4to. grado.
La Educación Física, Orientación Cristiana y las actividades de Expresión artística fueron pilares en la formación de los alumnos, desde ese tiempo.
En sus inicios la filial fue una obra misionera, prestando ayuda a escuelas públicas, al Hospital Salto y a los damnificados de la inundación del año 1959.
En el año 1960 se vislumbra contar con un terreno propio para construir el nuevo edificio y la perspectiva de crear el 1er. Año liceal. En el año 1964, la Conferencia Anual decidió a pedido de la filial Salto otorgar la autonomía a dicho colegio.
A partir de 1965, la filial Salto, pasó a llamarse “Escuela y Liceo Crandon Salto” y coincide con la inauguración de su nuevo de su nuevo edificio en Agraciada 1145, proyecto del Arquitecto Carlos Rodríguez Fosalba..
Desde su fundación se caracterizó por educar en un ambiente de alegría y compañerismo, los alumnos formaron su personalidad como fieles testigos de una educación desarrollada con amor, entrega y respeto por sus semejantes. La tarea encarada por la IMU se asienta en dos pilares: en lo religioso, por su identidad confesante; en lo académico, por su búsqueda de la excelencia en la educación que brinda.
Ser un colegio confesante, nos asegura un cuidadoso respeto del imperativo ecuménico al que nos sentimos permanentemente desafiados los metodistas.
No es menos importante, aunque sí consecuencia de lo anterior, la segunda característica, la que complementa el fundamento sobre el que se asienta nuestro colegio: la búsqueda de la excelencia en la educación que se brinda. La tarea es compartir y producir nuevos conocimientos con la mayor responsabilidad académica y rigurosidad científica.